POEMAS DEL PALESTINO NAJWAN DARWISH TRADUCIDOS DEL ÁRABE POR KHALID RAISSOUNI

 

 

 

1 el poeta palestino Najwan Darwish

El poeta palestino Najwan Darwish

Crear en Salamanca tiene el privilegio de ofrecer, en exclusiva, una amplia muestra de la poesía del palestino Najwan Darwish (Jerusalén, 1978) Poeta, periodista, traductor y crítico literario palestino. Se le considera como una voz singular y renovadora en el panorama poético árabe. Parte de su obra fue traducida al inglés, francés y español, entre otros. En nuestro país la editorial Valparaíso publicó, en 2016, un libro titulado “Nada más que perder”, traducido por Juan José Vélez Otero, con introducción de Nathalie Handal.

 

Agradecemos el envío realizado por intermedio de nuestro colaborador, el destacado poeta y traductor Mohamed Ahmed Bennis.

 

Las pinturas son del artista palestino Ismail Shammout (1930-2006).

 

2

 

 

 

HISTORIA BREVE SOBRE EL CIERRE DEL MAR

 

 

Al entrar en aquella calle, en las afueras de la ciudad

que lleva al campamento

si encuentras algunos niños saliendo de aquella escuela que parece una prisión

si encuentras a siete de ellos manteniéndose en el umbral del silencio contemplando

Si ves a un niño delgado, de ojos iluminados de tanta inteligencia terrenal,

ya habrás encontrado a mi amigo «Tissir

su gente tuvieron un país que les fue robado en la claridad del día

en sus ojos inquietos se puede notar el despertar de los pájaros

 ni las casas de cemento,

ni el recuerdo de estaño

y tampoco las voces temibles de la inalámbrica del ejército de ocupación durante las semanas «toque de queda», todo

no redujo ni un grano la iluminación en sus ojos.

había visto el mar una vez y nada podría convencerle de no ir por ahí otra vez.

En los largos días de toque de queda estaba obligado a tener paciencia

se quedaba con la promesa: «En algún atardecer, al levantarse el toque de queda te llevaremos al mar

Cuando al fin se levantó el «toque de queda» en alguna víspera, le dijeron: «el mar está ahora cerrado, vete a dormir

Aquella noche no durmió, imaginó a un viejo

cerrando el mar con un gran tablón de estaño

bajándolo de una estrella del horizonte hacia el arena de la playa  

lo cerró perfectamente con un gran candado (más grande que el de la tienda de su padre en la calle Omar Mukhtar)

Después se imaginó al viejo de vuelta a su casa.

 

Cuando entras a aquella calle en las afueras de la ciudad

que lleva al campamento

si vislumbras dos ojos iluminados de tanta inteligencia terrenal

pregúntales, por favor, si el mar de Gaza se habría «abierto» o todavía sigue cerrado.

 

 

3

 

 

 

LA ÚLTIMA MÁSCARA

 

No la he encontrado

todavía

aquella escritura que libera

aquella de la que me apoderé alguna vez

en las sacudidas de esos climas

que se parecen a la juventud y a la pasión

se parecen a los placeres del cuerpo cuando te sorprenden.

 

No la he encontrado

y tal vez ya no la buscaba

estaba ocupado de fruslerías y se mancilló mi sosiego

pretendí que no encuentro tiempo para afilar su hoja.

el tiempo estaba poniendo máscaras y llamaba

por detrás de la cuna del bebé

por detrás del reptar del bebé, los pasos del niño

y las sacudidas del adolescente

 

La angustia del joven, la desesperación del hombre

y la vejez de todas las promesas

cuando el tiempo ya no tiene máscaras para poner

 

Pero ahora

debo reptar

dar pasos

tropezar

persiguiendo mi angustia

y antes de todas las promesas yacer en el ataúd.

 

la última máscara está en mi mano y me la voy a poner.

 

4

 

 

 

EN LA TEMPESTAD

 

 

Te recuerdo en la tempestad

porque eres la tempestad

solo en ti hemos vivido obstinados,

supón que yo liberaría esta mañana

¿te perdería para siempre?

me dejaría caer en los abismos de una insondable perdida?

abismos que se procrean

abismos, escucha sus frías risas

y deja detrás de ti cualquier esperanza.

Supón que yo liberé esta mañana

 

¿me perdería a mí mismo para siempre?

Ésta, ya la he perdido ayer,

la he perdido también mañana,

el destino no me la devolverá sino para perderla?

¿cómo la gente entenderá que vivíamos obstinados

entre desarraigados y quedarse aferrados?

¿cómo iba a entender

que cada vez que me acercaba a la tempestad

me recordaba nuestra casa?

 

5

 

 

 

Y NO PARÁBAMOS

 

No tengo país para ahí volver

No tengo país para ahí desterrarme

Un árbol cuyas raíces agua de río que fluye

al no pararse muere

si se para también muere

Sobre la mejilla de la muerte y sobre su brazo

transcurrieron mis días más relucientes

mi país que cada día yo lo perdía

también lo estaba ganando cada día

Toda la gente a un solo país pertenecía

y mi país se multiplicada en las pérdidas

se regeneraba en las pérdidas

sus raíces en el agua estaban como yo,

si paran de serlo mueren

si no paran también mueren

ambos fluyamos con un río de rayos de sol

del oro en polvo que de antiguas heridas subía

Y no parábamos

Ambos fluyamos

Y nunca hemos pensado parar y reunirnos

 

No tengo país para ahí desterrarme

No tengo país para ahí volver

Y si me paro en algún país me muero.

 

Es un país que, por supuesto, la lluvia arrastró

Es un país que he perdido y recuperado

no tenía más remedio que perderlo y recuperarlo

Éste era mi destino

me desgarraba en el sueño recuperándolo

y en la vigilia perdiéndolo

no dormía

ni me despertaba

Es un país que la lluvia arrastró

dejándome tirado

sin del todo perderlo

y tampoco recuperarlo

La lluvia me arrastró y dejó a mi país fuera de mi alcance.

 

6

 

 

 

TAL COMO ÉSTOS

 

No te puede ocultar que mi conciencia está allí contra la justicia

contra la ley a la que veo sólo como una celda donde atado le arrodillan al derecho

en unas noches sin aurora

en una aurora sin noches venideras.

 

Te oí cantar esta noche a los desobedientes

Oí los secretos en tu voz

me dije a mí misma, tú eres desobediente tal como éstos

Te derriban las pasiones como una noche sin aurora

como una aurora sin noche venidera

como la muerte que es el principio

que estés donde están éstos

que seas como las tempestades resistiendo al mar

derrotadas y resistiendo el victoriosas porque resisten

que seas como las tempestades resisten

que seas contra la justicia tú eres la justicia.

 

 Oh alma

Tal como éstos eres tú

Tu destino es el destino de éstos

¿Por qué entonces me hablas en conversaciones de fabula?

¿Por qué entonces me insistes y yo dándole un portazo a la puerta detrás de mí?

¿A este país le echo gas y quemo colinas de sus espinas, que no devuelves?

¿Quién arrastrara esta pesadilla de su hocico oscilando como un rinoceronte?

Oh alma, tal como éstos eres tú

Éstos quienes no conozco y con quienes comparto destinos envenenados

Comparto con ellos cosas y no los conozco,

casi no sé quién eres tú, oh alma.

El rinoceronte pasea por las habitaciones

Pasea sin sentido en el laberinto de la repetición.

] Pesadillas consumidas

se ocultan y se venden como unas nuevas pesadillas[

Se acabó ya todo, oh años de miseria míos

casi no consigo conocerte.

 

7

 

 

 

ASESINADOS MÁS FELICES

 

Los refugiados dicen los periódicos

Los refugiados, la palabra se repite con frecuencia en oficinas con aire acondicionado

Los refugiados, la nieve cae sobre sus tiendas de campaña,

Los asesinados más felices que yo,

¿quién excepto yo, que envidiaría a los asesinados?

Como un pañuelo antiguo

la tierra de Siria se extiende

en una caja

¿la salvó un jinete o los ladrones la saquearon?

vuestro nombre es como una tela muerta

no se desgasta

me la vestí en el día de la resurrección

Oh, Dios, estos son mi gente

¿Cómo nos llamarás en los cuadernos del Juicio Final?

Sí, somos refugiados

                   

                 ***

 

Nadie diría lo que he dicho

y tampoco la tierra lo dejará ir

Ahora trato de dirigirme hacia mis cosas

pero la tierra

pone en mis manos los harapos de su padre muerto

la foto de su hijo perdido

de su hijo secuestrado

y de su hijo que la vendió.

Caravanas interminables

de esclavos

Historias de injusticias

interminables que nunca acaban

las pone delante de mí

y ni siquiera puedo huir,

La Tierra nunca me deja preocuparme de lo mío.

 

 

8 Najwan Darwish leyendo sus versos

 Najwan Darwish leyendo sus versos

 

LE DIGO A MI OTRO

 

Le digo a mi otro dónde está el cuaderno de los vicios,

Entrégamelo para que escriba en él mi alegato o mi acusación

O para que presente por lo menos mi testimonio.

Cuaderno de los vicios que he puesto cerca de la cama o sobre el televisor

O en la mesa de la cocina

Era solo para mí y era propiedad pública

Incluso los transeúntes en él estaban escribiendo.

Me digo a mí mismo: ¿qué es mi otro, que has escrito en el cuaderno

y qué escribieron sobre ti?

Yo le digo a mi otro, que es yo mismo, igual si escribimos o si no escribimos

Nadie sabe dónde está este libro ahora

Le digo a mi otro, lo bueno que es ser analfabeto entre el otoño y el verano

Lo bueno que es no saber hasta los árboles

estos que de cualquier modo, han perdido la memoria

Le digo a mi otro, ya no importa quien dice al otro, dado que tampoco es importante quién es el otro en la topografía de este olvido.

Le digo a mi otro cómo se llenó el cuarto alrededor de nosotros con libros y viajes

¿Cómo nos volvimos uno y la lengua supone que somos dos?

¿Cómo he llegado a alcanzar todos los límites finales sin tener ni un inicio?

¿Es lícito que uno termina sin llegar a tener un principio?

 

***

 

Después de un instante del tiempo

se me ocurrió que la tierra es rehén en la mano de las estaciones

Cada vez que una estación la libera otra la coge como cautiva

¿Entonces, puede que haya alguna esperanza

para que encontremos nuestra libertad en una tierra cautivada por las estaciones?

 

 

9

 

 

 

CUATRO METROS

 

 En aquella habitación

de cuatro metros × cuatro

habían jardines extendiéndose hacia Grecia

ciudades persas enteras

Kandahar y Bukhara con sus minaretes cilíndricos

tenían el lado nórdico del Cáucaso y aquellas sombras verdes de Ararat

Muchos cementerios que evitaba siempre buscar la identidad de sus dueños y palanquines balanceándose en las Mualaqat

mujeres con pañuelos blancos más extendidos que las eras.

la dimensión y la proximidad de aquella habitación eran piedras de molino 

giran sobre sí mismos

canales de música merodean sin contar aquellos músicos que ahí se establecieron  noches y siguieron su camino

Filósofos desesperados también y poetas fugitivos de las casas de sus madres

jardines de niños a cargo de jubiladas Hadas.

de los que no puedo apoderarme ahora ni siquiera nombrarlos

era una estepa sobre tierra y una muchedumbre de naciones como una boda en el amanecer del día de la Resurrección.

Oh Muhammad

Dónde te fuiste todo este tiempo?

 

Mucha gente se aferra a los palacios construidos en el paraíso

Pero yo no busco

esta mañana

sino unos cuatro metros × cuatro

yo sólo sé cómo los he perdido

yo sólo sé que nunca los voy a recuperar.

 

10

 

 

 

LAS LUCES LOS HENDIRÁN

 

 

 

Le dije no abuses en recordar los árboles

Porque los árboles no recuerden a nadie

Ve cómo los invasores se ponen bajo sus sombras sin quitarse sus cascos

Ve cómo pisotean sus sombras con sus botas

Los árboles no recuerdan los que los plantaron

No se preocupan de los que los arrancan

No se acordó de mí un árbol cuando fue desterrado de la tierra de mis antepasados

Los árboles debajo de las cuales dormía durante toda mi infancia me tratan ahora como si fuesen extranjeras

Le dije: Ya no creo ni siquiera en los árboles.

***

Le dije que no abuses en peinar el pelo largo de los días

Esta inmensa coquetería herirá cuando ella corriendo despeinada y descalzada en las estepas espinosas

Le dije a sus perecederos días igual que nosotros, ¿cuántos días están ahora debajo del barro?

Le dije economiza en encender las velas

dentro de poco soplará el mismo viento que extinguió la primera vela

que aquella primera mano encendió, y como tú, excesivamente abuso peinando el largo cabello de las noches.

Le dije que economiza incluso en el amor, porque ya escucho los adufes, provienen de la lejanía tormentosa

Oigo las cuerdas del instrumento distribuyendo un espectáculo sombrío

Imágenes sopladas

Oigo los días corriendo detrás de sus raptores en colinas vacías del aire.

***

Le dije no viajaba sino para escaparme de ti

y sólo llegaba a ti …

¿Cómo pudiste esconder este pequeño ídolo durante catorce siglos

y porque lo sacas ahora?

lo hendirán las luces de la mentira.

Él también le gustaría escapar.

11

 

 

 

 

TE LO DIJE MUCHAS VECES

 

 

Te lo dije muchas veces

Y mientras te lo decía los grupos hacían con su muerte pueblos

y la eternidad vacilaba

como un barco que acaba de descubrir el mar

Te lo dije muchas veces

Y mientras te lo decía creaba mi muerte

Te lo dije muchas veces, O estatua de barro

pero desde cuando oía el barro?

¿De quién se estaba burlando el alfarero

cuando te ponía grandes orejas que oían,

de quién se burlaba, o barro?

¿Y por qué el alfarero te ha creado un corazón?

Cuando lloras fluyes

y sólo se mantienen de ti las palabras.

Ahora estoy caminando sobre ti

es decir, que estoy caminando sobre mi muerte

Pero, te lo crees de verdad que unos colonos vinieron desde más allá de los mares y te robaron?

O barro, los invasores han robado mi muerte.

 

***

 

Aquí te sientas en el mediodía del miércoles del invierno del Carmel

Cerca de sus pinos y su mar

O barro

Ya has vivido lo suficiente

para que te sientes ahora y llores.

 

 

 

12

 

 

MUCHEDUMBRE DE FANTASMAS

 

 

 

Te golpea la oleada de gente

una oleada trenzada de miedos, de complejos de culpabilidad y de migraciones

Una oleada igual la levanta la abundancia

o se rompe en la escasez

igual te hunde

igual te golpea

Cree que eres parte de la llovizna de una ola

y te descasarás

igual te hunde

y igual te golpea la oleada de gente.

***

Estas palabras los anoté  en la calle entre el sueño y el despertar

mientras cruzas el valle de la sombra de la muerte

y dices a tí mismo, no tengas miedo

al hendimiento de los alientos

entre mirada y otra mirada

en el placer de la opulencia trascendente

La opulencia que dice al tiempo: Yo soy el tiempo.

También los anoté en la desesperación

en el abrazo del disgusto

en el desengaño que brinda las copas

en la multiplicación de los semejantes en el banquete de la humillación

en una abundancia que surge de la escasez

y en vano anotaste estas palabras.

***

Tu vehículo sacudido en el fondo de los abismos de una antigua esperanza

en la cima de una desesperación que casi se extiende

Tu vehículo sacudido

y los viajeros que te acompañan son una muchedumbre de fantasmas

que suben y bajan

y el vehículo sacudido en la trayectoria vertical de la extinción

una muchedumbre de fantasmas

y el vehículo sacudido.

 

 

13 Bejan Matur y Najwan Darwish

 Bejan Matur y Najwan Darwish

 

 

TRISTEZA EN LA CAPITAL ARGEL

 

La música golpea detrás de ti como una ola hambrienta

el piano es la voz de su hambre, la percusión de su ira

aunque se aleja .. basta con escuchar atentamente para oírla

no puedes concertar una tregua con ella, ni domarla

tiene los alientos de todos los náufragos

las voces de aquellos que no han encontrado su pan diario y se callaron.

[Pero ahora en este árido desierto estas buscando árbol para colgarte a ti mismo en ella pero no la encuentras]

No se alejan de ti, «las Casas del sol» *

No se alejan de ti los mensajeros de la montaña ni los vagabundos de la capital

Ni las palomas se hacen de Bagdad sobre las ventanas adornadas

Tampoco las aves practican el sexo colectivo con el cielo…

de ti no se separan los sublevados contra los que ha conspirado la lluvia y los guardias del gobierno

Tu eres el hijastro de aquellos y el perseguido de estos

la música suena en todos los sitios

y el aire se desgarra.

 

2

Imaginad una persona que nunca ha escuchado cantar a «Warda»

sus melodías egipcias en especial

En su voz está la ascendencia del condenado voluntariamente a la horca

y después no ejecutan

le dicen: Vete tu castigo es el amor.

Yo fui a Argelia y no volví

Aquel país tiene un corazón como la caverna

Si te metes dentro nunca saldrás

Tiene un amanecer sangriento

puntúa de dulzura como árboles de morera

y la muerte ahí no es una muerte.

 

* Barrio popular en la capital Argel

 

14

 

 

 

MONÓLOGO

 

Le dije a la mujer que comparte mi destino:

Tú eres como mi alma que insistentemente ordena la perdición,

le dije que el amor y las paredes de repente se hienden

y yo con ella desnudos delante del tiempo

La desnudez del verano y su viscosidad

la desnudez del invierno y sus temblores,

Pero donde he colocado mi destino, -que es el tuyo-

Esta mañana lo he buscado y no lo encontré?

te lo he confiado

Este insignificante que el recuerdo mantiene,

lo has esparcido como hacen las que viven en el lujo

o lo has intercambiado por algunas necesidades domésticas

¿Era útil en algo

para que tenga consuelo por su pérdida?

Es cierto que ya no siento nada

en la oscuridad de esta casa abandonada

Pero, en cualquier caso, era mi destino

que ahora te callas frente a su pérdida!

dices: Tú eres de un pueblo perdido

de un planeta perdido

He vivido contigo en un país abandonado

y he morado contigo una hogar abandonado

hemos bebido de dos copas abandonadas

tus libros eran dispersos y abandonados

No esperábamos nada más que el abandono

que se posaba sobre nosotros con la puesta de sol …

Ella me dijo: Esta es tu costumbre en amargar el abandono,

después, sus palabras se mezclaron con mis palabras

No sabía quién es el que se enfadó y dijo al otro:

Somos huéspedes del abandono

Sé educado!

 

15 N. Darwish

 N. Darwish

 

HUYE

 

 

Oigo una voz que me decía: Huye

y deja la isla de los ingleses detrás de ti

a nadie perteneces salvo esta radio perfectamente falsificado

Salvo la cafetera

salvo los árboles del jardín trazados sobre la seda del firmamento

Escucho la voz en idiomas que conozco

y en otras que ignoro:

Huye

y deja detrás los autobuses rojos y en mal estado

los ferrocarriles oxidados de los trenes

esta nación atormentada con una mañana de trabajo

Esta familia que cuelga la foto del Capital en la sala de estar como si fuese su padre

Huye de esta isla

Nada está detrás de ti salvo las ventanas

Ventanas a lo largo del alcance de la vista

Ventanas durante el día

y ventanas por la noche

Escaparates apagados de dolores iluminados

Escaparates iluminados de dolores apagados

Y oyes la voz: Huye

en todos los idiomas de los residentes de la ciudad

                                                          que huyen de los sueños de su infancia

de los dolores colonias que se convirtieron en firmas  frías en libros

                                                                        cuyos autores ya fallecieron

aquellos fugitivos, y se olvidaron de que huyeron, aquellos que son tan cobardes para cruzar la calle

ahora recogen toda su cobardía y gritan:

Huye.

 

16

 

 

TE OFREZCO ESTE VALS

 

Entre las moaxajas de Sabah Fakhri

y los ritmos de Mohamed Abdel Wahab

se mueve el vals  de mi noche

hay quién dispara desde la ventana

y quién insinúa el naufragio y los incendios

Incluso que la mismísima Jerusalén se derrumba

pero el vals no se detiene

Incluso cuando cae ardiendo cerca de mí una columna histórica

incluso cuando veo jovencitos sionistas haciendo el papel de ladrones representando ser sionistas,

son tan jovencitos que no los veo …

Te ofrezco este vals, te lo ofrezco.

 

***

 

No puedo comprar mis amigos de la muerte

La muerte compra y no vende.

 

La vida me dijo:

No compres nada de la muerte

La muerte solo vende la muerte

Ellos son para ti para siempre

están contigo para siempre

Tus amigos -si lo sepas- son la vida.

 

***

 

 

La eternidad en nada me concierne.

Me despierto sobre un asesinato fugaz y salgo de una pesadilla consumida

mi única relación con la tierra, con la transparencia del anochecer sobre un país robado

en el mar no me fijo

como evita el zorro mirar a su pierna herida.

 

 

????????????????????????????????????

 Otra imagen de Najwan Darwish leyendo sus versos

 

 

 

SOY UN FANTASMA Y SÉ DE QUÉ ESTOY HABLANDO

 

 

Se me ocurrió

mientras que la lluvia caía sobre los árboles asiáticos

debajo de la Muralla de China

cuando estábamos allí tomando té

y escuchando soñolientos cada uno los poemas de otro 

se me ocurrió decirles:

aquí somos fantasmas.

 

Los fantasmas se reúnen para calentarse

se mueven en grupos

porque saben que no forman parte del grupo

yo soy un fantasma y sé de qué estoy hablando

 

Se me ocurrió una idea y la oculté

Los fantasmas ya saben esto

y no les gusta escucharlo de nadie

Los fantasmas tratan de olvidar

y cuando se reúnen en grupos

lo hacen para olvidar

beben té

y leen poemas cada uno en los oídos de los otros

para olvidarse.

 

Ahora estamos

debajo de la Muralla de China

La lluvia cae

mientras que el té está a punto de acabarse

también los poemas

soy un fantasma y sé de lo que estoy hablando.

 

 

18

 

 

De los residentes del infierno soy, señor,

Muchos años estaba sentado aquí

¿No me merezco convertirme en ciudadano?

¿Incluso en el infierno las casas tienen sus propietarios que recogen el alquiler

y inquilinos desalojados?

Pensábamos que el Infierno era un lugar para asentarse, un final de la perdición

(de hecho, lo imaginamos una cárcel; sin asociaciones que denuncian la tortura, y los ángeles / verdugos inmunes de cualquier responsabilidad …)

Pero aquí estamos en el infierno y nada de eso!

¿Quién hubiera creído que iba a estar sentado con las manos puestas sobre mis mejillas

esperando la salvación

incluso en el infierno?

 

 

He vivido los dos el paraíso y el infierno

tantas veces

 y se me han repetido frecuentemente hasta que el Paraíso ya no era paraíso

ni el Infierno un infierno

También me he cansado de caminar en el istmo;

Ayer me lo imaginé como una playa oscura

descalzo

me metía cerca del pie de la ola

y debajo de mis axilas mis sandalias para más allá del istmo

El mar era tan oscuro

y yo era como un ser humano

que lleva sus sandalias y enfrenta su suerte.

 

En esta noche tuve temor y no bajé al istmo

dije me dormiré y visitaré Metina

Ahora solos abren la puerta para un visitante que viene del infierno.

 

19

 

 

SÉ QUE ERES MI VOZ

 

 

Quisiera que llegase a todas partes del mundo

para que sepa que era el este y el oeste

Quisiera que volviese a los jardines y viese el Infierno con sus propios ojos

Quisiera que me niegue

y que se parezca a toda la gente

Quisiera que ascendiese al trono rodeado de ángeles

Lo quisiera errante y fugitivo

como un rostro que vi en la diáspora

 

 

solo la Tierra es refugiada

y sabe que el cielo es su tienda de campaña puesta sin puntales

solo el Cielo es refugiado

y sabe que la tierra es su tienda de campaña quemada

 

 

Quisiera que reunieses la ansiedad de los muertos de la tierra muerto tras muerto

Quisiera que estuvieses abrumado de sus cargas

Quisiera que aprendieses de memoria sus poemas, los recitases y los olvidases

Quisiera que empezases como forastero

y que volvieses como forastero

y que tu destierro quépase para los firmamentos

Quisiera que despertases los muertos de la tierra y les pidieses el perdón

y el olvido

 

 

Quisiera que te disipases

en los adufes de los árabes, los salterios de los persas y los trovadores de la India

para que sepa que eres mi voz.

 

 

20 Najwan Darwish

 Najwan Darwish

 

 

DEBAJO DEL SOL DE BEIRUT

 

 

Errar en pueblos de sueño abandonados

el corazón de su gente se convirtió en bolsas de nilón en los centros comerciales

su Historia perseveran borrarla las luces de neón y los limpiadores

a todas horas

Una muchedumbre de consumidores que solo compran el dolor visible para aquellos que han pasado sus noches

en habitaciones de refugio que nunca se convierten en hogares

en países de asilo que nunca se convertirán en países

No debes gritar

Ellos fijan sus manos sobre la Cruz del refugio

Tienes que perdonarles a los clavos y ocultar sus cicatrices

mientras desciendes

Tienes que ocultar tus muñecas con largas camisas.

 

***

¿Qué le hace un canto a San Marón

a los hijos de Sabra y Chatila, que no crecieron

a sus madres que todavía tienen miedo

en los cementerios desordenados

en los cementerios desterrados

bajo el sol de Beirut?

No se desgastan los primeros momentos de darles a los clavos

de levantar la Cruz

de invadir el campamento

continuaras golpeando

de por detrás de las grietas de los años

de por detrás de la sangre de un canto

que levantan los cantores a San Marón.

…………………………………………….

 

21

 

 

Khalid Raissouni (Casablanca, Marruecos, 1965). Poeta y traductor. Entre sus libros de poesía están : Más allá del olvido y Libro de los secretos. Obtuvo una Licenciatura en Literatura Árabe por la Facultad de Letras y Humanidades de Tetuán en 1988 y trabajó como profesor de Lengua y Cultura Árabes en el Instituto Español Severo Ochoa, de Tánger. En 1985 participó en el Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes en Moscú y contribuyó en el Festival de Poesía Marroquí en Chauen en varias ediciones. Miembro de la Unión de Escritores de Marruecos desde 1986. Su producción literaria incluye poesía, artículos, estudios literarios y la traducción de literatura, especialmente poesía. Ha publicados sus escritos en periódicos y revistas marroquíes y árabes como Al Muharir, Al Alam, Al Bayan, Al Quds Al Arabi, Kikah, Al araby alyadid, Athaqafa al Yadida (Nueva Cultura), Nawafid (ventanas), Al Bayane Kuwait, Nizwa, Doha-magazine, Masharef Maqdissia, etc. Ha traducido libros de poesía de poetas españoles y árabes Premio Rafael Alberti de Poesía de la Consejería de Educación de la Embajada de España en Marruecos 2003.

 

 El poeta y traductor Khalid Raissouni

El poeta y traductor Khalid Raissouni

 

Aún no hay ningún comentario.

Deja un comentario