POEMAS LEÍDOS EN SALAMANCA POR EL ARGENTINO HUGO MUJICA

Hugo Mujica en la Sala de la Palabra (Salamanca, 2011. Foto de Jacqueline Alencar)

 

Crear en Salamanca tiene la satisfacción de publicar algunos de los poemas que el notable poeta argentino Hugo Mujica leyó en nuestra ciudad el 5 de octubre de 2011, durante el XIV Encuentro de Poetas Iberoamericanos, organizado por la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura, y  a él dedicado. Mujica nació en Buenos Aires (1942) y estudió Bellas Artes, Filosofía, Antropología Filosófica y Teología. Esta gama de estudios se refleja en la variación de su obra que abarca tanto la filosofía, como la antropología, la narrativa como lamística y sobre todo la poesía. En la década del sesenta vivió la vorágine psicodélica de Nueva York. Luego estuvo siete años en el monasterio trapense de Getsemaní, donde tuvo un profundo conocimiento de la meditación y el silencio. A la edad de cuarenta años empieza a publicar sus primeros libros, entre los cuales destacan: Brasa blanca (1983), Responsoriales (1986), Escrito en un reflejo (1987), Noche abierta (1999), Sed adentro (2001), Casi en silencio (2004). También cabe destacar los libros de ensayos: La palabra inicial (1995) y Poéticas del vacío (2002).

 

  Portada de la antología Altura del Vuelo

 

Los poemas seleccionados forman parte de la antología LA ALTURA DEL VUELO (Edifsa, Salamanca, 2011), a cargo del poeta A. P. Alencart. Al final de los poemas puede consultarse una bibliografía más completa hasta 2011, fecha del homenaje salmantino.

 

 

 Poema ‘Confesión’, con firma del poeta

 

 

LA ALTURA DEL VUELO

 

 

hay sombras que no parecen

sombras

como la de un pájaro

                desde la altura del vuelo

 

fugaz,

pero no menos negra

que la de un muro sin grietas;

 

hay jaulas que no son de rejas,

luces que no

iluminan: ciegan la transparencia.

 

cada sol más adentro

la sombra, noche a noche más alto el pájaro.

 

 

 

AÚN NO

 

 

Agitar las alas todavía no es volar,

                                           aún no es afuera.

 

Cuando el alma cabe por dentro

                           es que aún no es el alma,

                                                         es que aún no es de carne.

 

 

Hugo Mujica, el entonces alcalde Alfonso Fernández Mañuego y el poeta A. P. Alencart (foto de Jacqueline Alencar)

 

 

                                     EN LO ALTO                                                       

                                                                               

 

Hay brisa

 

y una línea de álamos

acuna

la vastedad

de este anochecer

sobre el valle.

 

            En lo alto

            un pájaro aquieta

                                     sus alas,                            

 

en lo alto, muy alto,

                deja de apoyarse en su vuelo.

 

 

 

 

FORMAS BLANCAS

 

 

En un baldío,

sobre el polvo y la

                     hojarasca                                    

 

un pájaro moribundo

                           aquieta sus alas.        

 

            Una nube, impasible,

                        juega

                        sus formas blancas.

 

Al final también mi boca se llenará

de tierra,

 

al final siempre se besa

                                aquello que desertamos.

Los poetas Judical Mbella, Hugo Mujica, A. P. Alencart y Luis Frayle Delgado (Foto de J. Alencar)

 

 

ESCULPIDO EN LOS ESCOMBROS

 

 

siempre queda

un rastro de todo

                      lo que pasa,

 

una taza de loza

con su asa quebrada,

 

una sábana raída

donde se hospedaron

los sueños

en los que se soportó la vida;

 

el esqueleto de

una casa 

o una tumba derrumbada.

 

toda ruina tiene algo de templo,

 

todo hombre

es el resto de un suicidio

 

la gota en el cáliz

               que no bebimos hasta el vacío.

 

 

 

 

REVELACIÓN

 

 

Hay una hendidura

en la palabra

               hendidura,

 

un desgarro donde

                     cada palabra calla,    

                                     donde todo callar crea;

 

               es lo que el decir tiene de aliento    

               no de sonido,

               es donde en cada palabra

                                               nos escuchamos revelados.

 

 

El poeta brasileño Paulo de Tarso Correia de Melo y Hugo Mujica (foto de jacqueline Alencar)

 

 

ORILLAS

 

 

 

afuera ladra un perro

 

a una sombra, a su eco

o a la luna

para hacer menos cruel la distancia.

 

siempre es para huir que cerramos

una puerta,

es desierto la desnudez que no es promesa

 

la lejanía

de estar cerca sin tocarse

             como bordes de la misma herida.

 

adentro no cabe adentro,

 

no son mis ojos

los que pueden mirarme a los ojos,

son siempre los labios de otro

                            los que me anuncian mi nombre.

 

 

 

 

 

EL BORDE DE SÍ

 

 

 

A los pies de una

escalinata,

 

aferrada al

niño que mece en sus                                         

                           brazos,

 

una mendiga

extiende su mano,

 

                  se asoma a su borde,

                                        desnuda su tajo.

 

Cada vida es lo que en ella se abre:                               

                             su vacío, donde se humaniza dios.

 

 

Diptico del homenaje a Mujica en Salamanca

 

POR DENTRO

 

 

En lo alto ningún aleteo

presagia

          destinos

 

ni deja estela

el tren que a lo lejos       

(tan lejos

que no se oye)

                   atraviesa el llano;

 

más cerca, más dentro o

más ahora

 

hay una casa desierta

                     pero cerrada

 

como un miedo a nadie:

como un abrazarse

                       con los propios brazos.

 

 

 

 

TRASLUZ

 

 

Sin sombra ni silbido 

sobre la llanura

                 pasa el viento

                         y solo las hojas y la piel

                                                      lo saben.   

 

Habría que mirar

correr el río

hasta lavarse los ojos del propio reflejo;                        

 

                 hasta vislumbrar la transparencia:

                                                    hasta desnudar la mirada.

 

Los poetas Juan Ángel Torres Rechy (México), Hugo Mujica y Carlos Aganzo (España), por la calle Prior (foto de J. Alencar)

 

 

OFRENDA

 

 

Siempre se parte y

                 cada vez se vuelve,

 

como vuelve el niño

a reclamar el regalo prometido,

como se vuelve a casa

                            y a la muerte cierta.

 

Al final de todo

son de otros los pasos

                        hacia uno mismo

 

lo propio, la ofrenda,

es la huella de un vuelo caído

 

la estela de un tajo

                        en la comunión de las sombras.

 

 

 

UN HOMBRE

 

 

 

Como una siembra

sin tierra

 

un hombre cae en la calle,

                  se dobla sobre sí, muere;

 

errante, un perro

lo huele,

lame su frente, y en silencio                   

                                   se acuesta a su lado.

 

Mujica recibiendo el diploma de Huésped Distinguido de Salamanca, con Agustín Sánchez de Vega y A. P. Alencart (foto de J. A.)

 

 

 

ESA SED DE LA CARNE

 

 

 

la mesa ya fue servida, pero no

fuimos nosotros

 

nuestro es el pan cubierto de moho

y esa copa quebrada

que no puede contener

su vacío;

 

el hambre, y alguna vez,

sólo a veces,

el descanso

                    del olvido.

 

lo nuestro,

lo que nos hace suyos,

es esa sed de la carne que ya

no llamamos alma,

 

la desnudez de lo que no somos:

el espejo sin azogue

                             frente al que un dios se desnuda.

 

 

 

 

OTRO INICIO, OTRA MÚSICA

 

 

nada responde a nada

cuando todo habla.

 

hay que soñar

un sueño sin voces,

 

volver a cantar escuchando.

 

dejar correr una lágrima

con la cara

bajo la lluvia

 

un silencio

que sea anuncio, un anuncio

que lo nazca,

 

          un alba en la palabra alba.

 

 

Hugo Mujica en el Balcón del Ayuntamiento de Salamanca (foto de Jacqueline Alencar)

 

PARA ALBERGAR UNA AUSENCIA

 

 

 

se nace para albergar

una ausencia

y la desterramos

                           hacia horizontes,

 

a veces somos nosotros esa

ausencia,

a veces osamos el frío

                          que otro cuerpo tiembla

 

o el hambre

que nos hace iguales.

 

sólo a veces,

como para saber qué fue

la vida

 

como para saber que fuimos otros.

 

 

 

SEÑALES BLANCAS

 

 

sobre la playa

 

saludan con pañuelos blancos

los próximos

                      navegantes.

 

agitan pañuelos

              al mar más transparente

 

un espejo sin azogue, un alma

sin carne

 

eterna e inútil

como un rostro sin marcas,

un cuerpo sin tajos

una estatua

                       sin musgo.

 

encallados en su propia proa

despiden

la barca vacía,

 

son los de siempre,

los eternos:

los que buscan salvar la vida

                                                no viviéndola,

 

son las señales blancas

con que se rinden

                                    en plena vida.

 

 

Hugo Mujica bajando las escaleras del Salón de Recepciones del Ayuntamiento, junto a los poetas Miro Villar yCristina Falcón (foto de J. A.)

 

RITUAL DE LO INÚTIL

 

 

como ver caer

una estrella

sin nombrar un deseo;

 

o como a quien no se le destinó

ningún destino salvo

la espera

de lo que pasará

            sin llevarnos,

 

lo que miramos

sin ver

porque no es igual a nosotros.

 

ritual de lo inútil

o la esperanza extrema:

 

un niño ciego frente

a un espejo,

como si lo que uno es

                         no hiciera falta para serlo.

 

 

 

PARTIDA A PARTIDA

 

 

I

 

Sin ropa se nace,

se brota

 

desnudo se llega:

             partida a partida.

 

 

II

 

No tener adónde ir

             no es que nadie nos espere,

 

es no tener dónde regresar:

                                     la muerte es nacer afuera.

 

 

Hugo Mujica y Alfredo Pérez Alencart en una terraza de la Rúa Mayor (foto de Jacqueline Alencar)

 

 

 

BIBLIOGRAFÍA BÁSICA DE H. M.

 

 

 

  1. Brasa blanca. Ed. Sitio del Silencio. (Poesía)
  2. Sonata de violoncello y lilas. Ed. Sitio del Silencio. (Poesía)
  3. Ed. Nostromo. Bs. As. (edición electrónica)
  4. Segunda edición. Ed. Nostromo. Bs. As.
  5. Camino del nombre. Ed. Patria Grande. (Ensayo)
  6. Responsoriales. Ed. El Imaginero. (Poesía. Prólogo de Humberto

Díaz Casanueva)

  1. Origen y destino. De la memoria del poeta presocrático a la esperanza

del poeta en la obra de Heidegger. Ed. Carlos Lohlé. (Ensayo)

  1. Escrito en un reflejo. Ed. El imaginero. (Poesía)
  2. Camino de la palabra. Ed. Paulinas. (Ensayo)
  3. Solemne y mesurado. Ed. Losada. (Cuentos. Prólogo de Ernesto Sábato)
  4. Kyrie Eleison. Ed. Troquel-Estaciones. (Ensayo)

         1991: segunda edición.

         1994: tercera edición.

         2008: cuarta edición. Ed. Guadalquivir.

  1. Kénosis. Ed. Troquel-Estaciones. (Ensayo)

         2009: segunda edición. Ed. Marea.

  1. Paraíso vacío. Ed. Troquel. (Poesía)
  2. Para albergar una ausencia. Ed. Pre-textos. España. (Poesía)
  3. La palabra inicial. La mitología del poeta en la obra de Heidegger.

Ed. Trotta. España. (Ensayo)

          1996: segunda y tercera edición.

          1998: cuarta edición.

          2003: quinta edición.

  1. Nueva edición reescrita y ampliada. Ed. Biblos. Biblioteca

Internacional Martín Heidegger. (Buenos Aires

  1. Flecha en la niebla. Identidad, palabra y hendidura. Ed. Trotta. España. (Ensayo)

          1998: segunda edición.

          2003: tercera edición.

  1. Noche abierta. Ed. Pre-textos. España. (Poesía)

 1999: segunda edición.

          2009: tercera edición. Ed. del Temple. Santiago de Chile.

  1. Notte aperta. Antonio Pellicani Editore. Roma, Italia.
  2. Sed adentro. Ed. Pre-textos. España. (Poesía)
  3. Poéticas del vacío. Orfeo, Juan de la Cruz, Paul Celan, la utopía,

el sueño y la poesía. Ed. Trotta. España. (Ensayo)

2002: segunda edición.

            2004: tercera edición.

            2009: cuarta edición.

  1. Casi en silencio. Ed. Pre-textos. España. (Poesía)
  2. Poesía Completa, 1983-2004. Ed. Seix Barral.

        2006: segunda  y tercera edición.

        2008: cuarta edición.

        2010: quinta  edición.

  1. Lo naciente. Pensando el acto creador. Ed. Pre-textos. España. (Ensayo poético)
  2. Bajo toda la lluvia del mundo. Ed. Seix Barral. (Relatos)
  3. Ed. Pre-textos (España)
  4. Poesie scelte. Raffaelli Editore. Rimini Italia. (Antología poética)
  5. What the embrace embraces. Coimbra Editions. San Francisco U.S.A.

 (Antología poética)

  1. La casa y otros ensayos. Vaso Roto Ediciones. Monterrey, México.
  2. Pesmi. Ed. Kud. Ljubljana, Eslovenia. (Antología poética)
  3. La pasión según Georg Trakl. Poesía y expiación. Ed. Trotta. España. (Ensayo)
  4. Más hondo. Vaso Roto Ediciones. México. (Antología poética)
  5. Fragmentos de la creación. Ediciones Monte Carmelo. México.
  6. Poesia. Ed. Proxima-RP. Bulgaria. (Antología poética)
  7. Y siempre después el viento. Ed. Visor. España. (Poesía)
  8. Cada hoja que cae. Ediciones Lar. Chile. (Antología poética)

 

Jacqueline Alencar, Hugo Mujica y Alfredo Pérez Alencart, con un cuadro de Pérez Fiz (foto de J.A.P.A.)

 

Homenaje a Hugo Mujica (El Adelanto)

 

Perfil de Salamanca (foto de José Amador Martín)

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